viernes, 29 de mayo de 2015

Podemos. Cómo ganar mucho arriesgando muy poco.




PODEMOS decidió no acudir a las elecciones municipales con su propia marca. Eso me pareció al principio una decisión muy extraña, pero hoy creo que fue una absoluta genialidad. Presentarse a elecciones en medio de una sopa de letras (algo que, por cierto, no le gustaba nada al Sr. Pablo Iglesias, ver este vídeo ) tiene muchas ventajas. 

1.- Extender la mancha de aceite
Se votó a la vez municipales y autonómicas. Allí donde no se presentase lista a nivel municipal, existía un riesgo evidente de perder voto también para las autonómicas, especialmente siendo un partido nuevo. La inercia es votar lo mismo en un sitio que en el otro, o bien no votar nada en absoluto. Cuantos más votantes consigues a nivel municipal, más potencial de votos tienes para la lista a autonómicas. 

El objetivo estaba claro: presentar listas a municipales en todos los ayuntamientos posibles. Pero ¿como? No había tiempo de gestionarlo todo...

Se aplicaron dos estrategias diferentes. Dividieron los municipios en 2 grupos según su tamaño. Simple pero efectivo.

En los pequeños, la regla fue la agrupación de electores. Acudir como agrupación de electores tiene como requisito previo aportar firmas apoyando la creación de dicha agrupación. La cantidad necesaria es proporcionalmente relevante. Ese fue el primer filtro automático que se aplicó. Si hay suficientes votantes que les apoyan de inicio, entonces seguro que algo sacan. Además, los propios vecinos del pueblo los reconocen como "de los nuestros". Un filtro más. Y si al final nos salen rana siempre se podrá decir que, en realidad, no son Podemos.

Pero tiene otra connotación aún más retorcida: la lista sólo sale si te lo curras mucho. Si no se alcanzan las firmas o no salen concejales, la culpa es de los del pueblo. Y aún mejor: te queda menos tiempo para dedicarlo a analizar que está pasando en la organización ni para criticar sus decisiones. Tienes derecho a trabajar y escuchar, pero no a opinar. Recuerda que tú no eres Podemos. Eres un náufrago en tu isla.

Si sales como concejal es que has hecho lo debido. Si no, la culpa es tuya porque no te implicaste lo suficiente. Pero no te preocupes, que contamos contigo para el futuro. Ah, y muchas gracias por los votos que nos aportó tu trabajo en tu pueblo para las autonómicas. 

¿Y los grandes?. En los municipios grandes presentaron… la mega-coalición-abrazo-del-oso. Y aquí sí que se jugó fuerte. Indique el lector una sola coalición a la sombra de Podemos que no haya sido controlada / pilotada al 100% por Podemos. No son coaliciones entre iguales: son filas indias detrás del Sr. (o Sra.) que Podemos seleccionó en cada caso. Si queréis aprovechar nuestra Ola, os ponéis en nuestra Cola. Y calladitos. Que le pregunten si no a Izquierda Unida en Madrid. Y después que le pregunten a ICV en Barcelona. (¡Qué enorme diferencia! ¿Donde está Joan Herrera? ¿Donde está el PSUC?)

2.- Añadir Votos
Si soy Podemos, recibo los votos de Podemos. Si soy el cabeza de lista de una coalición, recibo y gestiono después los resultados de todos los votos de la coalición.

Por ejemplo: se está negociando ahora quién debe ocupar la alcaldía de Barcelona, con qué apoyos y a cambio de qué y se afirma que Ada Colau debe coordinarlo todo porque consiguió el 25% de los votos. (¿quien recuerda el nombre de su partido?. Yo no)

Ese dato no es correcto: la COALICIÓN cuya lista encabezaba Ada obtuvo el 25%. Ella sola habría conseguido menos de esa cantidad. ¡Si no, no se habría presentado en coalición!

3.- Gestión posterior
No se trata de los municipios. Podemos se aburre con los ayuntamientos (les pillan enseguida, como en Rivas). Se trata de las Mancomunidades, de las Diputaciones y, sobre todo, de las Autonomías. Se trata de gestionar presupuesto con su poder asociado. Afirman que no entrarán en gobiernos autonómicos. ¿Quien lo necesita? Eso desgasta. Preferirán las direcciones generales, las empresas públicas, los cargos de libre designación, las televisiones autonómicas…

En Catalunya sabemos muy bien en qué acaba eso: Por la mañana dirijo la policía y por la tarde voy a la manifestación contra mis compañeros de gobierno. No es política ficción, ni tampoco un capítulo de Monty Phyton, es la historia del Tripartito en la Generalitat.

4.- Riesgo
No han corrido ningún riesgo. Si sale mal, la culpa es de los locales o de los socios de coalición que no han trabajado lo suficiente. O las encuestas estaban mal. O como se les oye decir: este cambio va a ser más lento de lo que quisiéramos. 

¿Y cuando sale bien? Entonces toca el "ahora dejadme a mí que ya me ocupo yo". ¿Y si los municipios se rebelan y deciden ir a la suya?. Ningún problema: hoy libertad, mañana ya volveremos a por ellos. Desde el presupuesto. Y de aquí nos vamos a las generales. 

Cero riesgos y ganancia infinita. Parece el negocio de un banquero rescatado. 

Lo dicho: Robespierre y Lenin no hubiesen sido capaces de montar un tinglado mejor.